Séraphine de Sentils- |
“En
los instrumentos de cuerda, el alma es una pieza de madera en forma
de cilindro puesta dentro del instrumento y que mejora la resonancia,
transmitiendo las vibraciones del puente al conjunto del
instrumento.”
Hermosa
la tarea de un simple cilindro. De su simplicidad dependen la obra
ejecutada, el artista que la materializa y el instrumento que la hace
posible.
El
alma de todos los seres, animales y plantas, es como el simple
cilindro, sin ella no serian posibles ninguna de la expresiones
artísticas que se exteriorizan con la participación de los cuerpos.
El
alma se transmite a las cosas inanimadas, reflejando en ellas todo el
poder sustancial de lo animado.
El
alma. Esa parte invisible tan evidente en aquellos que consiguen
liberarla de las cárceles a las que se ven sometidas. Cuerpo y alma,
compañeros inseparables, en lo femenino y en lo masculino, pareja
inseparable condenado el uno a la putrefacción, la otra a la
exportación, quien sabe a qué lugar del infinito, después de su
trayectoria terrenal, debatiéndose constantemente entre el ser y no
ser.
Cuerpo;
contenedor de lo inmaterial, consumidor abusivo de sensaciones y
apetitos. Devorador carnívoro de más cuerpos, incansable,
incombustible depredador de evaluaciones. Cascara.
Alma;
cilindro ecualizador que transmite las vibraciones al cuerpo,
aportando y recibiendo en un reciproco intercambio todo tipo de
emociones y crecimientos. Soplo vital, impulso rítmico,
estimulo que mueve lo inamovible.
Camille Claudel- El Vals-escultura |
Es
en el alma donde la vida se complace en ser vivida. Es en el alma
donde la poesía se abastece, donde el ruido se armoniza y el
tacto encuentra el camino.
Es
en el alma donde el gusto nutre el cuerpo, la vista mira hacia
adentro y el olfato descubre el germen de la lluvia.
El
cuerpo vacila, cuando la carne duele, cuando el sinsabor le entumece
las piernas y lo priva de su agilidad. El cuerpo renuncia a ser
cuerpo, cuando la carne lo flagela, cuando pesa sobre el cuerpo que
soporta el sacrificio de la existencia.
El
cuerpo se queja de la mansedumbre que le decepciona, de la agitación
cerebral que lo sodomiza, de su impotencia para resolverse a sí
mismo, de su pereza para levantarse, resumirse en un
todo, desmontarse para recomponerse.
Es
el cuerpo un ser inútil, reclamo insistente de necesidades, sujeto a
un sujeto que pretende ser algo más que una pieza entre piezas
semejantes.
Duele
el cuerpo, pero duele más si desconoce su alma. Duele la carne y se
aplaca con el silencio que brota del interior, de ese cilindro que
armoniza la carne con la existencia y reconcilia la vida con la
consciencia.
Es
en el alma donde los buenos y malos diseños se recomponen y
exteriorizan, donde crecen los propósitos con mutuo acuerdo de ambas
partes, donde las madres crían a sus hijos, donde el amor se
abastece para seguir siendo.
Cuerpo
y alma deciden y soportan, sincronizan y separan, destruyen y
recomponen, siempre entre la duda y la compensación, el equilibrio y
la sinrazón.
Nadie
carece de alma, pero son muchos los que la inutilizan, otros los que
la ignoran, los más la esclavizan, la revenden o la manipulan.
Alice Neel- "Familia española"- Óleo |
Algunos
la crucifican, para saciar el miedo a perder el cuerpo; creen que la
eternidad consiste en un desplazamiento donde sus posesiones serán
recuperadas y por la gracia de dios seguirán viviendo por los
siglos de los siglos.
Otros
esperan reencarnarse, rectificar tantas veces como sea necesario
comportamientos anteriores, hasta conseguir una pureza tal que les
exima de la condena a seguir siendo carne.
Otros
la diseñan según sus percepciones, inclinaciones o creencias. La
particularizan de tal modo que nadie puede penetrar en ella, la
seccionan en dos partes, la terrenal y la espiritual, sin tener en
cuenta de que todo cambia, todo es pasajero, nada es perenne, ni en
la humanidad ni en el universo.
El
alma de Violeta nos dejo una estela de belleza, un fragmento de su
alma, porque su alma nunca se tuvo a sí misma, siempre fue para los
otros.
Cantante,
escritora, compositora, escultora, pintora, tapicera. Un alma con un
simple cilindro.
2 comentarios:
Buena reflexión, Gene, eso somos, de eso estamos hechos, con eso contamos, y que difícil es armonizar esas dos partes en uno...
Besos
Magnifica forma de mostrarnos lo que somos y no somos, me encanta la manera en que lo expresas Gen, un abrazo feliz!
Publicar un comentario